23.2.15

José Luis García-López: la leyenda del cómic. 25 años de Club Batman

Aunque pontevedrés de nacimiento, la vida de José Luis García-López se desarrolla primero en Buenos Aires, donde llega con tan solo cinco años, y más tarde en los Estados Unidos, donde fijó su residencia en Nueva York desde 1974.


Primeros años de formación.
Sus primeras influencias fueron las de Joe Maneely (Black Knight), el gran Russ Heath (Little Annie Fanny), el bonaerense Enrique Vieytes (Duval y Gordon), o el cordobés Luis Domínguez (Jonah Hex). Con once años comienza a estudiar un curso de dibujo por correspondencia que su hermana le compró en Continental School. Tras comenzar a formarse, empezó a publicar a los trece con una historia de vaqueros, pero no por ello dejó de buscar el modo de mejorar sus conocimientos artísticos, ingresando a la temprana edad de dieciséis años en la Escuela Panamericana de Arte de Buenos Aires, de donde precisamente era director Vieytes. Allí recibió clases durante tres años de éste, Borisoff, De la Mota, Pereira, Novelle, o el enorme Alberto Breccia.


Carrera en Argentina.

Una historia de ciencia-ficción de 32 páginas para la revista Esquiú hizo que comenzara a trabajar en la Editorial Columba. Allí empezó con relatos cortos de tipo histórico y aventuras como El filibustero (1968) y La Guardia Suiza muere en Roma (1970), ambos escritos por Robin Wood, algunas adaptaciones de clásicos de la literatura como Los Tres Mosqueteros, e incluso adaptaciones de películas como La reina Cristina de Suecia. Hasta que en diciembre del 72 (enero del 73 según otros) empezó a dibujar los guiones de Héctor Germán Oesterheld (El Eternauta) para Roland el corsario en la revista Fantasía. Primero junto con David Mangiarotti y más tarde haciéndose cargo en solitario del apartado gráfico, completó los primeros 27 capítulos hasta su marcha definitiva a los Estados Unidos en 1974. En ese mismo año aún colabora con la Editorial Record en la revista Skorpio, con una historia llamada El pirata, justo antes de marcharse a Nueva York. A primeros de los ochenta, ya afincado en los USA, siguió colaborando con Columba en historias como El reloj de la eternidad, con guión de Leo Ventura.





Trabajos para Charlton Comics y Gold Key.

Desde el año 68 no obstante, ya alternaba su trabajo en Argentina con encargos para Charlton Comics. Primero con historias de monstruos y después con una serie de historias románticas realizadas por encargo desde Argentina a través de diversas agencias. Entre las publicaciones en las que colaboró se encuentran Ghostly Tales, I Love You, Hollywood Romances, Johnie Love, Just Married, Love Diary, Romantic Story, Sweethearts, Teen Confessions, o Time for Love, a cuyo número #18 corresponde esta página de aquí al lado (una historia corta de diez páginas llamada A kiss to remember). De esta manera pudo establecer cierta relación con Dick Giordano, editor por aquel entonces de Charlton y futuro colaborador en DC Comics. De la misma forma, también colaboró en algunas publicaciones de terror editadas por Gold Key, como Grimm's Ghost Stories o Boris Karloff Tales of Mystery.



Comienzos en DC Comics.

En 1974 se trasladó a Nueva York, donde conoció al editor de DC Comics, Joe Orlando. Su primer crédito para DC fue junio 1975 de Pesadilla En Oro dentro de Action Comics #448, en la que entinta los lápices de Dick Dillin. Al mes siguiente, hizo lo propio con el dibujo de Curt Swan en La vida privada de Clark Kent (Superman #289). Se pudo estrenar al dibujo y tintas con una historia de complemento protagonizada por Hawkman dentro de Detective Comics #452 (octubre de 1975) con guiones de escrita por E. Nelson Bridwell. A finales del 75 encadena su trabajo más continuado en DC hasta la fecha, realizando las portadas y los lápices de la miniserie de seis números Hercules Unbound (con tintas del mítico Wally Wood). A ese encargo le sucederían otros en los posteriores años como sus números en Tarzán sustituyendo a Joe Kubert (casi nada), Action Comics, Weird War Tales, Detective Comics, Adventure Comics, Superman (donde se alterna con Curt Swan y comienza su relación laboral con el guionista Gerry Conway), Batman o algunos de sus trabajos más destacados dentro de las colecciones Weird Western Tales y Jonah Hex (ambas protagonizadas por Hex), con guión de Michael Fleisher. En el año 1978 vuelve a colaborar con Gerry Conway en All-New Collector’s Edition #54, con una historia que enfrenta a Superman contra Wonder-Woman. Del mismo año es DC Comics Presents, una serie protagonizada por Superman y algún invitado de turno, que se lanzó en agosto del 1978 junto con el guionista Martin Pasko. 


Los gloriosos años ochenta.

En el año 81, José Luis García-López hizo algunos números de The Brave and the Bold y posteriormente encadenó algunos de los trabajos por los que será siempre recordado. El inolvidable crossover DC-Marvel entre Batman y Hulk dentro de la serie DC Especial Series #27 guionizado por Len Wein. En 1982 comienza el que será su trabajo más largo y lamentablemente nunca editado para ser adquirido por el aficionado. Estamos hablando de la DC Comics Style Guide, una iniciativa de Warner Bros para explotar los personajes de la compañía con fines de mercadotecnia. Otras obras muy destacables de esta etapa tan fructífera son Atari Force (escrita por el inefable Gerry Conway), que fue una de las últimas series largas que dibujó García-López. Aquí nos llegaron los 13 primeros números que fueron los que dibujó él con la ayuda en algunas páginas de las tintas de Eduardo Barreto, para posteriormente cambiarse los roles y entintar él el lápiz de Barreto hasta el penúltimo número de la colección. También de esta década está su participación en la miniserie que daba continuación a Camino a la Perdición (sí, la que llegó a hacerse película) con guiones de Max Allan Collins. En el 86 hace la miniserie de seis números que recupera a Deadman (con guión de Andrew Helfer), algún arco de Nuevos Titanes (sustituyendo a George Pérez), números suelto de Legión de Super-Héroes, y vuelve a colaborar en 1988 con Gerry Conway en una miniserie de cuatro números llamada Cinder & Ashe, que no tenía nada que ver con Atari Force, pero que es una de las obras por las que muchos aficionados (entre los que me incluyo) le consideran un auténtico maestro.


Los noventa y el reconocimiento de la crítica.

Su trabajo en la miniserie Twilight con Howard Chaykin llegó a recibir una nominación a “Mejor Dibujante” en los prestigiosos Premios Eisner del año 1992. No sería esta su última nominación. Personajes como Star Rovers, Manhunter 2070, o Tommy Tomorrow hacen de esta obra una de las más buscadas por los fieles de García-López. Posteriormente, empieza una etapa en la que pone su maestría al servicio de otros dibujantes, como por ejemplo entintando a Trevor Von Eeden y Russell Braun en Legends of the Dark Knight (del #16 al #20 con idéntica correspondencia en la edición de Zinco), dentro del serial Veneno, donde además hacía las portadas. Otro de los trabajos recurrentes del artista en este período fue la colección Elseworlds, donde alterna las tintas con los lápices en algunos ejemplares, como por ejemplo Superman: Kal (1995), Batman: Reign of Terror (1999), Superman Inc. (1999) y Superman: Realworlds (2000). Como curiosidad hay que decir que a pesar de que la mayor parte de su carrera la desarrolló para DC, en 1997 uno de los escasos trabajos que García-López hizo para Marvel, concretamente en el número único Dr. Strangefate para la línea Amalgam (que era coeditado con DC, no obstante), le valió otra nominación junto a Kevin Nowlan para los Eisner dentro de la categoría “Mejor dibujante y entintador o equipo de dibujante y entintador”.


El legado de García-López en el siglo XXI.

Desde el comienzo del nuevo siglo hasta la actualidad, José Luis García-López ha seguido produciendo en menor medida pero sentando cátedra en cada uno de los trabajos que ha acometido. Tras el Batman: Gotham Knights #10 (2000), se implicó en la esperada continuación de la primera miniserie de Deadman, con los llamados como números #5 y #6 en el año 2002. Más tarde, los seis números serían recopilados junto con las portadas que hizo para Deadman: Dead Again en un tomo editado aquí por Planeta DeAgostini en 2007. De 2003 data su participación en la miniserie de tres números que daba continuación (aunque contando hechos en paralelo) a Camino a la Perdición (llamada On the Road to Perdition) con guiones de Max Allan Collins. Tras algún número suelto en la regular de Hawkman, se encarga de otra miniserie en 2005, DC Special: The Return of Donna Troy con cuatro números escritos por Phil Jimenez y siendo entintado por George Pérez. Aquí fue editado por Planeta en un solo tomo un par de años más tarde. En 2006 dibuja un arco llamado The Hypothetical Woman (La Mujer Hipótesis) para la colección JLA: Clasificado, que ocupa seis números (del #16 al #21) con guiones de Gail Simone.

Uno de sus últimos trabajos más continuados es su arco con los Metal Men escrito por Dan DiDio (jefazo en DC Comics), dentro de la publicación colectiva Wednesday Comics que se extendió a lo largo de doce números en 2009. En 2011, Planeta lo publicó todo en su tamaño original (36’5×26 centímetros) dentro de un enorme  tomo de 200 páginas. Tras esto, lo hemos podido disfrutar en colecciones como Batman Confidential #26-28 (2009); DC Universe: Legacies #3-4 (2010); The Spirit, vol. 2, #17 (2011); o All-Star Western, vol. 3, #10 (2012). Destacar por último, el trabajo más reciente que ha llegado a las tiendas. Adventures of Superman: Jose Luis Garcia-Lopez recopila su trabajo en los años 70, tanto dentro de la colección de Superman (#294, #301, #302, #307, #308 y #309) como en el especial que lo enfrenta con Wonder Woman. La edición original del año 2013 ha sido hace pocos meses editada por ECC Comics, bajo el nombre de Superman contra el mundo, y se puede encontrar relativamente fácil.

Roberto Corroto.

8.2.15

BATMAN ESPECIAL DETECTIVE COMICS #27 - 75 AÑOS DE BATMAN. Roberto Corroto.

Con motivo del 75 aniversario del, a mi juicio, personaje franquicia de DC Comics, la editorial se propuso hacer un recopilatorio de algunas nuevas historias cortas protagonizadas por Batman, a lo que ECC aquí en España tuvo las buenas miras de incluir la primera aventura de éste en Detective Comics #27 (mayo del 39). En marzo salió a la venta en los USA con una portada de Greg Capullo que no le hace ninguna justicia al contenido. De hecho, mi elección hubiera estado dentro de las diversas cubiertas alternativas que se encargaron a otros autores (mi elección hubiera sido la de Chris Burnham).
Dejando a un lado el continente y entrando de lleno ya en el contenido, nos encontramos con la mencionada primera aparición de Batman en la industria del cómic. “El caso de los magnates de la química” (también conocida como “El caso del sindicato químico”)estaba escrita por Bob Kane y dibujada por Bill Finger, que siempre han sido los nombres asociados a la creación de este icono. Bien es cierto que el primero se lo supo montar mejor. Ahí permanece la polémica sobre la cesión de los derechos de manera unilateral de Kane, que hizo que Finger no estuviera jamás acreditado como creador de Batman al contrario que él. La historia en sí es heredera de las influencias con que fue creado Batman. Es decir, un personaje pulp, más violento de lo que nos podemos imaginar en la actualidad y que incluso dejar morir a los villanos sin mover un músculo por evitarlo.



El remake de esta misma historia es lo que hacen Brad Meltzer Bryan Hitch. A diferencia de lo que Bob Kane hizo en su momento, Meltzer nos propone conocer por medio de un constante diálogo interior, las motivaciones que llevan a Batman a hacer lo que hace en esta versión.Se trata eso sí, de unas motivaciones bien distintas a las que nos podemos encontrar en obras con material más contemporáneo. El dibujo de Hitch sigue sin convencerme. No sé qué le sucedió a este hombre en determinado momento, que ya no ha vuelto a engancharme (ni a mí ni a mucha gente que conozco) como lo hizo con The Autorithy oThe Ultimates.



La tercera historia (segunda en la versión USA) que nos encontramos es“Vieja escuela”,escritapor GreggHurwitze ilustrada por NealAdams.Hurwitz debería tener más o menos tomada la medida al personajedespués de bastantes números de la serie Batman:The Dark Knight a sus espaldas. Pero aquí no sé si optó por experimentar un pococon ideas que en dicha serie obviamente no le iban a dejar utilizar,o simplemente escribió lo primero que se le pasó por la cabeza. Elresultado es confuso, pero no porque no se entienda el mensaje quequiere dejar, sino por la manera de hacerlo. El dibujo de Neal Adams se va adaptando a las diferentes épocas (desde la Golden Age a la Modern Age) que aparecen en las páginas, pero ya no es el Adams que dejaba con la mandíbula desencajada a los aficionados tiempo atrás. No obstante, las leyendas están para ser respetadas y Adams lo es con creces.



Días mejores” es la cuarta historia. El guión de PeterJ. Tomasiy los dibujos de Ian Bertram son un soplo de aire fresco después del bluff anterior. Tomasi parece recoger el testigo dejado por Miller en la última página de The Dark Knight Returns,y plantea una vejez de Bruce Wayne en la que puede disfrutar de la compañía de sus discípulos, celebrando con tranquilidad su 75(buen guiño) cumpleaños. Hasta que las alarmas saltan y cada uno de ellos (Dick, Damian, Tim y Bárbara) deben cumplir con sus obligaciones. A mí me deja con el buen sabor de boca de las historias que se alejan por completo de lo pretencioso, y el arte de Bertram ayuda a ello con creces. Su estilo es en parte deudor de otros como los de Frank Quitely, aunque con toques más indies. De las mejores historias del tomo sin lugar a dudas.



Héroe” es una historia de Francesco Francavilla. Hay ocasiones en que uno no puede ser objetivo aunque se lo proponga.Es lo que me sucede con todo lo que hace Francavilla, sea de mayor o menor entidad. Aquí lo tenemos en el más corto de los episodios de este especial, haciendo un bonito homenaje al Batman:Año Uno de Miller y Mazzucchelli.



En“El sacrificio” de MikeW. Barr GuillemMarch se cuenta como en el aniversario de la muerte de Thomas y Martha Wayne, El Fantasma Desconocido muestra a Bruce cómo hubiera sido su vida de no haber muerto sus padres. De esta manera vemos el lado bueno de ese futuro que nunca será, pero también vemos qué hubiera sido del mundo sin la existencia de Batman. El trabajo de Barr con los guiones del murciélago siempre me ha gustado mucho y parece que no ha perdido la mano para encandilar. El talentoso dibujante mallorquín demuestra por qué siguen confiando en él los editores USA.



Gothtopia” con guión de John Layman y el arte de Jason Fabok. Es el único de los cortes que no es autoconclusivo y eso es algo que, pese a que no es mala historia, me molesta bastante. Layman dispone una Gotham del futuro sacada de Un Mundo Feliz, donde todo es orden y nada escapa a las garras de Batman y un grupo de ayudantes encabezado por Catbird (una Selina Kyle del futuro).Pero al igual que en las influencias de las que bebe, esta utopía vestida de blanco brillante esconde un corazón sucio. Y será Batman el encargado de limpiarlo aunque tenga que hacerlo en solitario.Interesante guión que seguro se degustaría más como una historia única en su propio formato. El dibujo de Fabok pese a no tener un estilo que esté dentro de mis preferencias, es correcto y lo que sí es muy destacable es el color de TomeuMorey.



La última historia es “Veintisiete”, con argumento de Scott Snyder y dibujo de Sean Gordon Murphy,que nos lleva de nuevo al futuro. Pero a un futuro bien distinto del que contaba antes Layman. Aquí nos vamos a un escenario salido más de BladeRunner,en el que Snyder introduce la clonación como una solución a la vida sin Batman. De esta manera, el título hace referencia a la vida efectiva de los clones de Bruce Wayne, que una vez empiezan a llegar al final de su ciclo han de instruir a sus reemplazos. Como idea no está mal, aunque el desarrollo (uno de los puntos flojos de este guionista de buenos planteamientos) acaba siendo algo farragoso. Por suerte para él, cuenta una vez más con el increíble Sean Gordon Murphy en el arte. Y digo una vez más porque ya son varias las colaboraciones que se han marcado juntos(American Vampire: Supervivencia de los más aptos,TheWake). Murphy vuelve a hacer un despliegue brutal en lo que se refiere a diseño de escenarios y personajes.



En resumen, estamos ante un tomo de 96 páginas a un precio bastante ajustado de menos de 13 euros, que tiene un poco de todo, bueno y malo, pero que es recomendable tanto para los seguidores de toda la vida, como para los que empiezan a descubrir a Batman ahora.

Batman 75 Aniversario - Club Batman