Dick Grayson es Robin y siempre lo será. No es el Robin que han conocido los lectores más jóvenes de los cómics de Batman, no. Tampoco es el Robin con el que crecerán los nuevos aficionados al noveno arte. Pero es el Robin de siempre, el primero, el original. Dick Grayson sentó las bases de lo que debía tener cualquiera que aspirase a ser el ayudante de Batman. Después de llevar el uniforme nada menos que 44 años, algo sabrá de lo que hay que tener. Pero Dick Grayson no acaba en Robin. Cuando sintió la necesidad de dejar de ser un niño, se unió a los Jóvenes Titanes. Después dejó de ser Robin para pasar a convertirse en Nightwing y ya era un adulto. Incluso vistió la capucha de Batman por un tiempo breve, antes de volver a ser Nightwing. Lo que nadie puede dudar es que Dick Grayson es uno de los personajes más importantes de los mitos de Batman... y mucho más que eso a la vez.
Robin, y por tanto Dick Grayson, es uno de los primeros personajes recurrentes en aparecer en las historias de Batman. Su primera aparición se produjo en el número 38 de ‘Detective Comics’, apenas once números después de que debutara el propio Señor de la Noche. No está del todo claro cómo surgió Robin, ya que los relatos de sus padres de ficción son contradictorios. Bob Kane se atribuyó la idea, en colaboración con el guionista Bill Finger. “Pensé que todo chico joven quería ser como Robin. En lugar de esperar a crecer para convertirse en un superhéroe, querían serlo ya”, explicó en su autobiografía ‘Batman & Me’. Si Batman era como Sherlock Holmes, Robin iba a ser su Watson. El nombre de Robin, según Kane, se le ocurrió a él como homenaje a Robin Hood, mientras que el de Dick Grayson salió de la mente de Finger como homenaje a la novela policíaca de comienzos del siglo XX.
Este es el relato, digamos, oficial. Pero Jerry Robinson, guionista también de los primeros años de Batman, se atribuyó igualmente parte del mérito. Según Robinson, sí fue Kane quien pensó en dar un compañero a Batman, pero según ha explicado quería darle un traje de superhéroe alejado de la línea realista del primer año de vida del protector de Gotham, más superheroico que detectivesco, y un nombre de origen mitológico (“creo que uno de los nombres en los que pensaba era Mercurio”, explicó Robinson). El guionista asegura que la idea de darle el nombre de Robin Hood fue suya, y que fue a partir de que ese nombre fuera definitivo cuando se decidió adaptar el disfraz del aventurero de Sherwood. Robinson se atribuye el toque final: la inclusión de la R en el pecho del disfraz.
¿Cuál de las dos versiones es la real? Sólo quienes crearon a Robin saben la verdad. Lo que sí se sabe es que Dick Grayson y Robin tuvieron que librar una última batalla antes de nacer. El editor Jack Liebowitz, jefe de Bob Kane en aquella época, no le quería en el cómic, pensaba que Batman estaba mejor solo y que las madres se quejarían al ver a un niño peleando con criminales. “¿Por qué no lo probamos por un número? Si no te gusta, lo eliminamos”, le dijo a Liebowitz. Aquel número dobló las ventas de ‘Detective Comics’ y Robin se quedó para siempre en los mitos de Batman. Acababa de nacer el Dúo Dinámico, que es como se llamó desde entonces a la pareja formada por Batman y Robin.
En su primera aparición ya se relató el origen del nuevo héroe. Dick Grayson es un joven acróbata de circo que trabaja al lado de sus padres. Juntos son los Grayson Voladores. Una noche, el chico escucha a dos matones intentando extorsionar al dueño del circo. Poco después, y tras la negativa del circo a pagar por esta protección mafiosa, sus padres mueren en un atentado. Alguien cortó sus cuerdas y cayeron al vacío. Aparece Batman y Dick señala al asesino de sus padres: Tony Zucco. Batman ve en el pequeño Dick su propia tragedia personal y le acoge como su pupilo. No pasa mucho tiempo hasta que le revela su identidad secreta y le ofrece trabajar para él. Y poco después, ambos consiguen capturar a Zucco. El relato de este origen encontró una versión más completa y actualizada en la saga ‘Batman Año Tres’, publicada en 1989 en los números 436 y 439 de ‘Batman’. La recreación de la historia, que tiene lugar después de la muerte de Jason Todd y con Dick ya convertido en Nightwing, se desencadena por la liberación de Tony Zucco, que ha cumplido su pena de prisión. También se descubren nuevos detalles sobre estos hechos en ‘Dark Victory’.
El personaje se mantuvo más o menos invariable en las décadas de los 40, 50 y 60. Dick seguía siendo el mismo chaval tan divertido como responsable, el compañero de aventuras de Batman y el toque de color en las historias del Caballero Oscuro. Tal fue su éxito desde el principio que entre 1947 y 1952 tuvo aventuras por separado en la revista ‘Star Spangled Comics’. En 1964, Robin dio un paso más en su carrera: fue uno de los miembros fundadores de los Jóvenes Titanes, una especie de Liga de la Justicia adolescente de la que formaban parte Aqualad, Kid Flash, Speedy y Wonder Girl, contrapartidas de menos edad de los principales héroes del Universo DC. Como todos los personajes de cómic en aquella época, el desarrollo dramático se limita a su origen. Después importaban más las historias de aventuras que los giros realistas que pondría de moda Marvel en los años 60.
Al igual que para Batman, 1966 es un año importante para la historia de Robin y Dick Grayson. La exitosa serie de televisión de los años 60 nunca tuvo a Robin en su título, pero era un show de dos, del Dúo Dinámico. Este Dick Grayson era muy similar al de los cómics de las décadas precedentes. El papel de Robin era el primero que interpretó Burt Ward en el mundo de la televisión y quedó encasillado para siempre. Aunque en el momento en que se estrenó la serie Ward tenía 21 años, encajó a la perfección como un adolescente de quince años gracias a su estatura. Ward salió en los 120 episodios de la serie y pronunció 320 veces la palabra “holy” (“santo”), una expresión que acabó por convertir en seña de identidad de su personaje. “Hicimos una serie familiar. Estaba orientada a los padres, a los niños, a los adolescentes, todavía el mundo podía ver nuestra serie”, explicó Ward.
A la finalización de la primera temporada, los productores dieron un paso más y apostaron por una película en la que Batman se enfrentase a cuatro de sus principales enemigos. Robin estuvo a su lado, pero como Dick Grayson no tenía diálogo en pantalla. Importaba el héroe, pero su alter ego no demasiado. En 2003, Ward volvió a unirse a Adam West para interpretar un divertido experimento: ‘Return to the Batcave: The misadventures of Adam and Burt’. Los dos actores se interpretan a sí mismos, tratando de encontrar el Batmóvil de la serie que ha sido robado. A pesar de que su nombre está claramente asociado a Robin, Burt Ward no fue el primer actor en darle vida en la pantalla. Los dos seriales de Batman de los años 40 ya contaron con su compañero. En 1943, el actor escogido fue Douglas Croft y en 1949 (serial titulado ya ‘Batman and Robin’) John Duncan. Dick Grayson no tenía demasiada importancia como personaje en ninguno de los dos.
En los años en los que la serie tenía éxito se multiplicaron las alusiones al carácter homosexual de Robin, algo que nunca ha tenido por mucho que los polemistas se lo quisieran encontrar. De hecho, en los años 40, DC Comics ya quiso enterrar cualquier intento de tergiversar la sexualidad del personaje creándole un interés romántico: la primera Bat-Girl, sobrina de Batwoman. En la serie de televisión, no obstante, no se buscó una pareja para Robin, sino para Batman. Primero Catwoman y después la segunda Batgirl, Barbara Gordon, la sobrina del comisario, ocuparon ese lugar. Dick seguía sin pareja conocida, algo que en el cómic no llegó hasta su relación con Starfire, compañera en los Titanes. Pero, ironías de la vida, su verdadero amor siempre ha sido Barbara Gordon (un amor magníficamente descrito en el annual de 2007 de ‘Nightwing’, publicado en España en el número 3 de la colección del héroe editada por Planeta). Dick también ha mantenido romances con la Cazadora y con Bette Kane, Flamebird, el personaje nacido en el nuevo universo DC tras la ‘Crisis’ como contrapartida de la Bat-Girl original.
Dick creció y dejó Gotham para ir a la Universidad, pero eso no acabó con el personaje de Robin aunque sí en cierta medida con el Dúo Dinámico. Robin seguía siendo una parte importante de las aventuras de Batman, pero el tono más oscuro de sus historias adquirido a partir de la década de los 70 convertía al Chico Maravilla en un elemento accesorio y muchas veces prescindible. Por eso, Robin empezó de nuevo a protagonizar sus propias aventuras en solitario dentro de ‘Detective Comics’. Poco a poco, Dick se sintió alejado de Batman en sus métodos para luchar contra el crimen y acabó por renunciar al traje de Robin. En el universo anterior a la ‘Crisis en Tierras Infinitas’ fue una despedida nada traumática, pero después de la saga que cambió el Universo DC para siempre se hizo una nueva interpretación: fue Batman quien decidió que Dick, poco centrado en sus estudios y sí en su labor como líder de los Titanes, dejara de ser Robin.
Esa fue la génesis de Nightwing. Tras dudar sobre su futuro como luchador contra el crimen y pensar incluso dedicarse a la abogacía, es Superman quien le sugiere la nueva identidad que puede asumir. El guionista Marv Wolfman es el encargado de llevar a Dick hasta la edad adulta con su nueva máscara, que se ve por primera vez en el número 44 de ‘Tales of the New Teen Titans’, editado en 1984. Su relación aquellos años con Batman pasa por sus peores momentos. Dick no acaba de entender que Bruce Wayne acoja a un nuevo muchacho para convertirse en Robin, Jasón Todd. La relación se reveló aún más tensa cuando el Joker acaba asesinando a su sucesor en la Batcueva. Pero poco a poco Dick va preocupándose más por Bruce, al que ve solitario y cada vez más arriesgado en su trabajo de vigilante. Su relación se normaliza casi por completo con la llegada del tercer Robin, Tim Drake, al que Dick apadrina abiertamente.
Llegamos así a la publicación de ‘Knightfall’, la saga en la que Bane rompe la espalda de Bruce Wayne y éste se ve obligado a ceder el manto del murciélago. Pero no a Dick, lo que provoca un nuevo distanciamiento entre maestro y pupilo. “Este lugar ya no se parece a mi hogar”, llega a decir Nightwing cuando Robin le introduce en la Batcueva para buscar al nuevo Batman, a un Jean Paul Valley que ha perdido los papeles por las enseñanzas que recibió para convertirse en Azrael, el ángel de la muerte. Cuando Bruce Wayne regresa a Gotham para enfrentarse a Jean Paul, Dick se une sin dudarlo a su mentor y al nuevo Robin. Es mucho mayor la lealtad que siente por Bruce que el rencor que le pueda tener por sus decisiones de años anteriores. Batman, Nightwing y Robin derrotan a Azrael (que se convertirá más adelante en aliado del Caballero Oscuro) y las diferencias entre ambos quedan zanjadas.
Bruce decide que todavía no está listo para retomar su identidad de vigilante y deja la capa y la capucha, esta vez sí, en manos del hombre que entrenó desde niño para sucederle. Dick Grayson por fin se convierte en Batman. Es octubre de 1994. “No puedo reemplazarte, Bruce, pero mentiría si no dijera que será genial sustituirte”, dice Dick al ponerse la capucha por primera vez. Pero no deja de ser un relevo temporal y todos lo saben. En enero de 1995, Bruce Wayne vuelve para retomar la vigilancia de Gotham. En ese tiempo, Dick se enfrenta a Killer Croc, el Señor de las Ratas, el Cobrador (Jean Paul Valley le marcó el pecho con el símbolo del murciélago en su etapa como Batman y éste busca venganza, sin saberlo, sobre un Batman diferente), Scarface y, sobre todo, a Dos Caras. Y es tras el regreso de Bruce cuando él y Dick mantienen la primera conversación sincera y profunda en años. “Moriría por ti, Bruce”, le dice Dick. “Pero no podía pedírtelo”, le responde Wayne. Con esa conversación, se recupera para siempre la relación de padre e hijo que presidió los primeros años de Batman y Robin.
Mientras Dick se alejaba y acercaba de la sombra de Batman, Robin jugaba sus bazas en el mundo del cine y la televisión. Salió perdiendo en la del cine, porque el personaje no consiguió formar parte de la adaptación que dirigió Tim Burton en 1989. Steve Englehart había escrito un guión, que finalmente no se utilizó, en el que Robin moría en la primera escena del filme. “Imaginé que todos los críticos comenzarían sus reseñas diciendo ‘esto no es la serie de televisión, ¡han matado a Robin!’”, explicó el guionista años atrás. Burton llegó a pensar en incluir a Robin con el rostro de Ricky Adison Reed (un actor prácticamente desconocido entonces y que ya no se dedica al mundo de la interpretación) pero consideró que la presencia del personaje no era necesaria. También se cayó de una de las primeras revisiones del guión de ‘Batman vuelve’. En esa ocasión se rumoreó que iba a ser interpretado por Marlon Wayans, un actor negro.
Los malos presagios se convirtieron en una triste realidad. Joel Schumacher le incorporó en ‘Batman Forever’. Pero aunque se llamaba Dick Grayson, en realidad se parecía mucho más a un Jason Todd veinteañero. El actor Chris O’Donnell no incorporó nada de lo que hizo de Dick un personaje querido a lo largo de décadas, todo lo contrario. Creó un joven resentido y vengativo, muy poco respetuoso (hasta la escena final) con los ideales de Batman y demasiado rebelde. De la esencia del Robin original sólo quedó su origen circense (aunque aquí era Dos Caras y no Tony Zucco el responsable de la muerte de sus padres), el nombre y los colores del traje. Nada más. Y eso se agravó en ‘Batman y Robin’, donde el incluso el traje quería parecerse más al de Nightwing que al de Robin. La rebeldía de Dick creció hasta el punto de querer volar solo, de rechazar la cruzada de su mentor y de sentirse tentado de aliarse con Hiedra Venenosa. Uno de los muchos sacrilegios del Batman de Schumacher.
Christopher Nolan ya ha asegurado que Robin no aparecerá en la nueva saga cinematográfica de Batman mientras él sea su director. El motivo, que su protagonista es un Batman principiante, por lo que Dick Grayson sería, en ese universo, demasiado joven para luchar contra el crimen. Pero la decisión parece tener una razón mucho más de fondo, como así lo dio a entender Christian Bale al afirmar que, si aparece Robin, él lo deja. Dick estuvo a punto de encontrar acomodo en la televisión, con un proyecto titulado ‘The Graysons’, que se iba a centrar en los años anteriores a su bautizo como superhéroe. Pretendía ser a los mitos de Batman lo que ‘Smalville’ ha sido para los de Superman. Pero el proyecto se quedó en la fase preliminar y ahora espera en un cajón de Warner a que alguien se acuerdo del personaje en el futuro.
A pesar de ese último revés, las cosas le fueron mucho mejor al Chico Maravilla en la televisión. La serie de animación de los 90 se acordó de él desde el principio y aunque Tim Drake ya era Robin en los cómics, el elegido para acompañar a Bruce Wayne en esta interpretación del mito fue el original, Dick Grayson. Eso sí, con el nuevo traje de Robin y con apariciones no tan frecuentes como estaban acostumbrados los aficionados del cómic. Bruce Timm, uno de los productores de la serie, defendía a un Batman solitario, pero la cadena sabía que era una buena baza para enganchar a la audiencia juvenil. Doblado por el actor Loren Lester, el personaje alcanzó su mejor momento en el doble episodio ‘Robin’s reckoning’, recreación del enfrentamiento con el asesino de los padres de Dick Grayson, Tony Zucco. En la segunda temporada, la serie cambió su nombre por el de ‘The Batman and Robin Adventures’, dejando claro que el personaje cobraba mayor importancia.
En la tercera temporada, la que redefinió el aspecto visual de los personajes, Robin pasó a ser Tim Drake, pero Dick Grayson volvió a aparecer, esta vez ya como Nightwing. Robin volvió a tener su oportunidad en el mundo de la animación con la serie ‘Teen Titans’. Con un estilo más moderno e infantil, la serie no hacía especial hincapié en las identidades secretas de los héroes y, de hecho, no se llega a mencionar en ningún momento que este Robin sea Dick (mención que sí se llega a hacer en uno de los números de la adaptación al cómic de dicha serie, ‘Teen Titans Go’). La voz de Robin en esta serie es de Scott Menville. Su personalidad está mucho más cercana a la del héroe maduro de los días previos a la creación de Nightwing que al niño que aparenta ser en la pantalla.
En ‘The Batman’, la serie de animación de esta última década, Robin tarda mucho en aparecer. De hecho, Batman consigue antes la ayuda de Batgirl que la del Chico Maravilla Robin llega a la serie en la cuarta de las cinco temporadas que tuvo, justo cuando ‘Teen Titans’ fue definitivamente cancelada y el personaje quedó libre para su uso. Estas temporadas están marcadas por la reunión de Batman con otros personajes del universo DC, por lo que no hay mucho margen para explorar el personaje de Robin. Esta interpretación es la más joven del héroe que se ha visto en la pantalla y, de hecho, buena parte de sus intervenciones son para establecer una relación de competitividad con Batgirl, como si estuvieran optando a ser el ayudante juvenil predilecto de Batman. Nightwing llegó a aparecer en esta serie, en un relato futuro. La voz de Dick y Robin es la de Evan Sabara, mientras que la de Nightwing pertenece a Jerry O’Connell.
Mientras Robin se abría camino en la pequeña y en la gran pantalla, Nightwing avanzaba en el mundo del cómic. DC decidió darle su propia serie en 1996, una serie que acaba de ser cancelada en Estados Unidos el pasado mes de febrero. Dick decide trasladarse a Bludhaven, una ciudad muy cercana a Gotham. Así los guionistas le tienen a mano cuando le quieran hacer intervenir en las aventuras de Batman, pero con la autonomía suficiente como para protagonizar su serie sin la interferencia continua del Señor de la Noche. Mientras Nightwing vigila las noches de esta ciudad, y tras pasar por otros empleos, Dick se convierte en agente de policía. Poco después, Nightwing se convierte en el líder de los Outsiders, del mismo modo que Batman lo había sido años atrás.
Los últimos pasos de Dick en el cómic han sido algunos de los más oscuros que ha vivido en su carrera. Poco a poco se fue difuminando la línea entre el policía y el vigilante y acabó despedido del Cuerpo de Bludhaven. Después participó de forma pasiva en el asesinato del líder mafioso Blockbuster, lo que le llevó a sentirse culpable por haber quebrantado la única norma que le impuso Batman en su adiestramiento: no matar. Dick le acaba confesando a Bruce su pecado justo antes de la saga ‘Crisis Infinita’. En ella, Nightwing iba a morir. O al menos esos eran los planes de DC, que al final recularon y convirtieron la escena en la que aparentemente se sacrificaba para salvar a Batman en una herida casi mortal de la que se recuperó junto a Barbara Gordon.
Aunque quiso matarle, DC ha decidido confiarle a Nightwing un papel muy activo en su universo, aunque todavía está por ver por cuánto tiempo. En palabras de Phil Jiménez (guionista y dibujante de varios proyectos recientes con los Titanes como protagonistas), es “el líder natural del Universo DC” por las enormes conexiones que tiene con la mayoría de los héroes de esta editorial. Envuelto permanentemente en las aventuras de Batman, en los Outsiders y de nuevo en un grupo de Titanes, y en su nueva vida en Nueva York. Visto todo lo que le ha sucedido a Dick Grayson en los últimos treinta años, el futuro le puede deparar cualquier cosa.
Juan Rodríguez Millán
BATMAN 70 ANIVERSARIO PORTADAS